Mauricio Sulaimán / Recuerdos de José Sulaimán / El Heraldo de México
En el boxeo se les conoce así al onceavo y doceavo asalto, antes era el 11 y 15, pero don José y el Consejo Mundial de Boxeo redujeron el número máximo de rounds en un combate a 12. Hay peleas de cuatro, seis, ocho y 10, pero las de campeonato son las que se celebran a más de 10.
Esos rounds son los que llevan al boxeador al límite de resistencia humana, es cuando la fatiga y la deshidratación acumulada ponen a prueba la fortaleza física y anímica de los guerreros del ring.
Esos asaltos de campeonato llevan al peleador a cavar muy profundo en su corazón para poder terminar y triunfar.
Siento, de manera muy personal, que es ahora cuando la humanidad está entrando ya a los rounds de campeonato en esta pelea contra el COVID-19. Ya son meses de resistencia, sacrificio, incertidumbre, sufrimiento y, en muchos casos, de crisis emocional.
Todos hemos encontrado momentos que ponen a prueba nuestra subsistencia, la relación directa con los seres queridos, la economía y la salud mental.
Con vivencias de todo tipo, estamos inmersos en una película de suspenso y terror, y que aún es incierto cómo será el fin de ésta.
Pero también contamos con la inspiración en las historias de grandes seres humanos que nos han regalado; ejemplo de actitud ante la adversidad, memorias de héroes anónimos que salen a cuidarnos, arriesgando sus propias vidas; innumerables capítulos relatados por personas de todo el mundo, con las que sentimos empatía.
La humanidad se ha unido, no hay diferencia en raza, color, religión ni posición económica; todos somos iguales, e igualmente frágiles, y estamos a la deriva.
El boxeador creció derrumbando obstáculos para salir adelante; combatió y venció una gran diversidad de amenazas, y escogió la vida en el gimnasio, la del sacrificio y esfuerzo. Es por ello, que ante la situación actual, el pugilista es una gran líder ante la humanidad.
Hay tantas historias de nuestros héroes del ring que nos llevan a festejar su existencia.
Con base en ello, el Consejo Mundial de Boxeo instituyó el premio: “Héroe de la humanidad”.
Se lanzó recientemente una convocatoria para invitar a todos los involucrados en este deporte a nominar a sus candidatos.
Hemos recibido infinidad de postulaciones de muchos países del mundo, y estas historias nos han llenado de orgullo y esperanza para un nuevo inicio de nuestra especie.
Es increíble ver cómo estos héroes están dispuestos a dar su vida por el prójimo; entusiastas de compartir lo poco que tienen con quién no tiene nada. En fin, existen muchos rings en los que estas estrellas están peleando, y el día de hoy, celebramos a todo aquel que vive para servir, sea de la manera que sea. ¡Gracias!
Poco para el reinicio
El deporte de los puños está por volver a las actividades en diversas regiones del planeta.
Hay muy buenas intenciones de promotores de élite, en el que se está buscando montar carteleras con boxeadores de alto nivel, con campeones mundiales, pero también con promotores locales que desean montar funciones modestas para dar acción a sus peleadores.
Así como todo, el boxeo deberá adaptarse y encontrar maneras innovadoras para volver.
El WBC trabajará de la mano con todas las comisiones del mundo, y con todos los promotores, a los que se les ofrecerá total apoyo, flexibilidad en reglas y procedimientos, y soporte con toda nuestra infraestructura a nivel internacional.
Días gratificantes
Esta semana tuve la oportunidad de platicar con grandes campeones del pasado, entre otros, los estadounidenses Larry Holmes y Marvin Marvelous Hagler, además del argentino Sergio Maravilla Martínez. Seguiremos manteniendo comunicado al boxeo por medio del WBC Talks.
¿Sabías que…?
Larry Holmes sostuvo solamente 22 peleas amateurs y decidió dar el brinco al boxeo de paga.
El destino lo llevó a ser el sparring de lujo del más grande de todos los tiempos: Muhammad Ali.
Durante cinco largos años, Holmes se mantuvo bajo la sombra en sólo ser el ayudante de Ali; viajó con él a las peleas legendarias de Zaire y Filipinas, denominadas como Rumble in the jungle y Thrilla in Manila, respectivamente.
Larry consideró como su hermano a Muhammad; no sólo fue su ídolo, también su compañero y maestro.
Y uno de los días más tristes fue esa noche cuando tuvo que pelear con Ali, en el Caesars Palace. Él le dijo al oído: “Ya no salgas al siguiente round, ya no te quiero golpear”. Y la respuesta de Muhammad fue “pegas como niño, ¿es todo lo que tienes? Te voy a noquear…”.
Anécdota de hoy
Llegó Larry Holmes a México para la convención anual de 1980 del WBC. Ahí estaba Don King y cientos de personas durante la ceremonia de apertura. De repente entra al lobby del hotel su rival, la esperanza blanca, Gerry Cooney.
Inmediatamente se armó el alboroto. Los gritos y porras de Don King sonaban por todo el recinto; de repente Cooney se acercó a Holmes, y se dieron un tremendo empujón. Mi papá, buscando separarlos, se metió solamente para recibir un derechazo de refilón de parte de Gerry, que iba dirigido para Larry. Todo acabó en calma.
Don José presumió tener quijada de acero, pues ni el peso completo lo mandó a la lona.