Por Mauricio Sulaimán / Hijo de José Sulaimán / Presidente del WBC
El próximo sábado 29 de enero, Don King regresa a la escena de la promoción boxística, al montar una cartelera importante en su estado natal, Ohio. La pelea estelar será protagonizada por el campeón mundial WBC, Ilunga Makabu, del Congo, en mandatoria ante el retador oficial Thibiso Mchunu, de Sudáfrica. El ganador de este combate se perfila como el siguiente rival de Saúl Canelo Álvarez.
Esta columna está dedicada a éste gran promotor. Don King es una leyenda viviente, toda una personalidad; inclusive, es más famoso y popular que la mayoría de los boxeadores de la actualidad.
Si él entra a un restaurante, en cualquier país del mundo, los asistentes se maravillan; las fotos y los autógrafos son incesantes.
Este pasado 20 de agosto cumplió 90 años, y su salud es magnífica, pero es un hecho que su actividad como promotor ha disminuido en los últimos años; por ello, celebro el evento del próximo sábado.
Don King es un triunfador. Uno de los más grandes y exitosos promotores del deporte y espectáculos en la historia; sin embargo, nada fue fácil, nadie le regaló nada. Nació en un estado donde el racismo era una terrible realidad, siempre tuvo que vencer todo tipo de obstáculos.
En su juventud trabajó con su esposa Henrieta, quien llevaba un sistema de apuestas clandestinas en Cleveland, y él era el encargado de cobrar los atrasos en los pagos. Un día, al realizar una de ellas, se dio un pleito, y uno de los individuos falleció, tras caer de nuca.
Don King fue sentenciado a seis años de cárcel. Salió a la mitad del tiempo por buen comportamiento, pero aprovechó cada uno de los días que pasó encerrado, pues se cultivó y estudió una carrera técnica; además de leer. Al salir encontró la oportunidad de regresar a la sociedad de una manera positiva, al promover una función, con el propósito de salvar un hospital, que el gobierno había decidido cerrar. ¿Quién peleó en esa vez? Muhammad Ali. Ese día, King se dio cuenta que el boxeo era un gran negocio, y fue así que su carrera como promotor empezó.
Don King cuenta con una cantidad de récords, incluyendo llenar el Estadio Azteca, con más de 136 mil aficionados, cuando Julio César Chávez venció a Greg Haugen, en 1993. Él perfeccionó el concepto de “promotor”; creó dinámicas para que el mundo se enterara de sus eventos, como darle un nombre atractivo a la función en turno, convirtiéndolo en una gran tradición. Lamentablemente se perdió esa práctica. Algunas fueron:
• The Rumble in the Jungle (Ali vs. Foreman, Kinshasa, Congo, 1974).
• The Thrillain Manila (Ali vs. Frazier, III, Manila, Filipinas, 1976).
• Thunder vs. Lightning (Chávez vs. Taylor, Las Vegas, EU, 1990).
• The Last Hurrah (Holmes vs. Ali, Las Vegas, EU, 1980).
• Póker de Ases (cuatro títulos mundiales, CDMX, 1993).
King le ha pagado por arriba de un millón de dólares de bolsa a más de 100 peleadores, y promovió las carreras de: Ali, Foreman, Frazier, Holmes, Tyson, Durán, Chávez, Sánchez, Macho Camacho, Finito López y Chiquita González, entre otros grandes del ring.
La colección fotográfica de este personaje, considerando que sus años de gran actividad, fueron antes de las famosas selfies, celulares o redes sociales, es impresionante. Visitas oficiales, con todos los Presidentes de EU de las últimas décadas, con gran cantidad de mandatarios y jefes de Estado, personalidades, artistas y atletas; en fin, Don King fue un trotamundos incansable.
Uno de los grandes negocios fue promover la gira de Michael Jackson, para convertirse en el máximo cantante mundial, y de Thriller, el disco más vendido de la historia.
Esa época de los 80 y 90, él promovió funciones de boxeo en Las Vegas, Atlantic City, Tokio, CDMX, Puebla, Monterrey e Inglaterra.
El ring side estuvo abarrotado de estrellas de Hollywood: Jack Nicholson, Bo Derek, Al Pacino, Arnold Schwarzenegger, Sylvester Stallone, Heather Thomas y, por supuesto, Michael Jackson, con su papá y hermanos.
King está de regreso; está feliz y emocionado de promover su función, aún y cuando no tuvo el apoyo de ninguna televisora, y estará haciendo su PPV bajo su plataforma. Una función que vale la pena ver, en Fight TV.
https://www.fite.tv/watch/don-king-homecoming-at-last/2pap8/
¡Suerte, Don!
¿Sabías que…?
El año de 1931 será recordado como un año especial; tres de los más importantes personajes del boxeo mundial nacieron: los promotores estadounidenses Bob Arum y Don King; además, el mexicano, mi querido padre, José Sulaimán.
Anécdota de hoy
Don King visitó nuestra casa en incontables ocasiones. Mi primer recuerdo del boxeo es precisamente bajar corriendo las escaleras, pues había escuchado un sonido muy raro, y era él, carcajeándose en la sala, junto a Ali y mi papá.
Don es un comelón de concurso y le encanta la cocina de mi mamá. Siempre iba directo, se sentaba a comer lo que hubiera en la estufa.
En una ocasión llegó con don José y se fueron directo a la sala; salió mi mamá a saludar y vio que él estaba agotado, y al querer ponerse de pie, doña Martha no lo dejó, se inclinó, lo abrazó y le dio su beso, pero al incorporarse, mi mamá vio cómo el cabello de Don King estaba electrizante y parado como nunca; se le hizo muy fácil oprimirlo hacia abajo, para ver cómo de inmediato retomó su lugar, sin dar crédito de lo que había hecho mi mamá.
“¡Qué barbaridad, Martha! ¡¿cómo se te ocurre hacer eso?! ¡Don no le permite a nadie tocar su pelo!”, dijo mi padre.
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